INTERVENCIÓN DEL TRABAJO SOCIAL EN LA EDUCACIÓN INFANTIL

 ¿CÓMO INTERVIENEN EL TRABAJO SOCIAL EN LA EDUCACION INFANTIL?

El modelo de intervención en la educación infantil debe tener en cuenta el carácter sistemático del contexto en el que se desarrolla el acto educativo. Es importante tener un cambio de perspectiva requiere la necesidad de establecer un puente o una unión entre educadores, y profesionales de los equipos de apoyo al centro de manera que permita contextualizar las situaciones en el marco global en el que se encuentran.

La función que el trabajador social tiene en una escuela, como puente entre la escuela, la familia y la comunidad, lo deja en una posición única para llevar a cabo visitas domiciliarias que favorezcan los objetivos de la escuela en torno al aprendizaje de los niños (Allen y Tracy, 2004) como parte de su labor.

La escuela, pues, es algo más que un lugar donde se enseña, es un sistema insertado en la comunidad que no puede escapar o aislarse del contexto social. En consecuencia, puede ser un lugar que favorezca el crecimiento de los niños y de los adultos, conformándose como un espacio comunitario que puede aportar determinados tipos de apoyo social para los niños y sus familias. No obstante, para esto, la escuela debe ser consciente y reflexiva acerca del contexto comunitario donde se ubica, las contradicciones que éste genera (Moreno, 2004, p.30 citado por (Navarrete Puentes, 2016).

Los modelos de intervención que se pueden tomar en cuenta para la intervención del Trabajo Social en el ámbito educativo son:

Ø  Modelo ecológico sistémico  

El modelo ecológico sistémico considera a los niños y niñas “como miembro de una familia, que, a su vez, está inmersa en su entorno, con el cual establece una serie de relaciones interpersonales e intergrupales, en donde ambos sistemas (familiar- comunitario) están interconectados constantemente; pero, a su vez, también puede considerar al menor como un alumno dentro de otro sistema, el escolar, y las interrelaciones que se establecen entre ese sistema escolar y el sistema familiar”. (NADAL, 1998, pág. 10)

Ø  La investigación – acción

 (Kemmis citado por Talamás, 2007) afirma que la investigación-acción es una forma de búsqueda autorreflexiva, llevada a cabo por participantes de situaciones sociales (incluyendo las educativas), para perfeccionar la lógica y la equidad de a) las propias prácticas sociales o educativas en las que se efectúan estas prácticas, b) comprensión de estas prácticas, y c) las situaciones en las que se efectúan las mismas (Magne La Fuente, Choque Arando, Velasco Campos, & Abastoflor Montero, 2020)

Según (Magne La Fuente, Choque Arando, Velasco Campos, & Abastoflor Montero, 2020) Se plantea una integración entre teoría y práctica, introduciendo la orientación participativa en la investigación, indicando además que el procedimiento implica un desarrollo de indagación – acción en cuatro etapas:

a)    Diagnóstico de una situación en la práctica.

b)    Formular estrategias de acción para la solución del problema, por parte de los propios implicados.

c)    Implementar las estrategias en la práctica y evaluarlas.

d)    Generar nuevas ideas en relación a la situación problemática, aclaradas por un proceso de reflexión.

Es importante mencionar que la investigación – acción, en base a dos vertientes, la sociológica y la educativa, desarrollo tres tipos de investigaciones: la investigación – acción en la escuela, participativa (IAP) y la cooperativa. (Magne La Fuente, Choque Arando, Velasco Campos, & Abastoflor Montero, 2020)

Ø  Método de intervención psicosocial a nivel familiar

Durante la niñez se recibe influencia de diferentes contextos como la familia y que aumenta las interacciones sociales con el transcurrir del tiempo. La familia cumple un papel fundamental en el desarrollo de los niños y niñas.

Para Palacios (1999a), la familia es el contexto más deseable de crianza y educación de niños y niñas y de adolescentes, ya que es quien mejor puede promover su desarrollo personal, social e intelectual y, además, el que habitualmente puede protegerlos mejor de diversas situaciones de riesgo. (Muñoz Silva, 2005)

“Bronfenbrenner distingue cuatro o niveles de influencia que ejercen en su accion de manera conbinada y conjunta en el desarrollo. Estas estructuras son el microsistema, el mesosistema, el exosistema y el macrosistema” (Muñoz Silva, 2005)

En este entendido en relación al trabajo social familiar, Hamilton (1995) propone un enfoque psicosocial y utiliza la palabra “persona-en-situación” el cual tiene tres componentes las cuales son la persona, la situación y la naturaleza de interacción entre ambos.

Ø  Modelo de intervención por programas

Como otro modelo para la intervención en el ámbito de la educación infantil podemos mencionar al modelo de intervención por programas, la cual se encuentra dentro de las capacidades del trabajador Social.

“Este modelo debe partir de un análisis de necesidades y demandas de la comunidad educativa y, a partir de ahí, el trabajador social, como miembro integrante de un equipo interdisciplinar, elaborará, junto con el resto del equipo y tras una negociación con cada centro escolar (a través de la Comisión de Coordinación Pedagógica de cada centro), un plan de actuación general que se estructurará en diferentes programas adaptados a cada contexto específico. Habrá que lograr implicar a un grupo de profesores que sean capaces de dinamizar un determinado programa desde el propio centro, dándoles la información y formación necesaria que les capacite para poder desarrollar las diferentes actividades del programa, pero contando siempre con el asesoramiento técnico y profesional necesario por parte de uno o varios especialistas que coordinen dichas actividades” (NADAL, 1998).

1.1.1.    Actividades que se pueden desarrollar

Dentro de las actividades que los trabajadores sociales pueden desarrollar en el ámbito de la educación infantil según (NADAL, 1998) se encuentran:

Ø  Participar en la elaboración y desarrollo de programas de prevención y detección dirigidos a la comunidad educativa.

ü  Estudio de la zona de actuación.

ü  Participar en programas de prevención inespecífica en el área socioeducativa.

ü  Colaborar en programas de detección, previa a la escolarización, de niños con necesidades educativas especiales.

ü  Detección inicial, en educación infantil y primer ciclo de primaria, de situaciones de riesgo social, en colaboración con el profesor-tutor.

ü  Intervención inicial en las problemáticas socioeducativas que se presenten, especialmente en Educación infantil y primer ciclo de Primaria.

ü  Establecer o potenciar mecanismos de coordinación y trasvase de información formales, con los diferentes servicios de la zona.

Ø  Realizar el estudio y la valoración sociofamiliar de los casos detectados. Elaborar la propuesta de intervención socioeducativa directa o canalizar hacia el recurso pertinente, con el posterior seguimiento y evaluación del caso.

Ø  Participar en la elaboración y realización de actividades de orientación educativa y sociolaboral.

Ø  Colaborar con los distintos órganos de representación del centro escolar, según las necesidades

Ø  Asesorar a las familias y participar, en su caso, en el desarrollo de programas formativos de padres y madres de alumnos.

Ø  Elaborar y difundir materiales e instrumentos propios de la intervención socioeducativa.

En relación a los aspectos elementales que el Trabajador social debe realizar dentro del campo educativo se presenta en el grafico a continuación:

Fuente: Obtenido de Trabajo Social y Educacion Primaria Mediacion Hacia Una Cultura de Paz